Nos encantó nuestra estancia en L'Orangerie en un pueblo tranquilo cerca de la playa y de ciudades como Perpinya. El anfitrión fue muy amable y el ambiente del lugar era relajante y perfecto para desconectar. Nuestra habitación era original y tenía una bañera y ducha muy chulas. Además, el desayuno que se servía en el patio era abundante y delicioso. Definitivamente recomendamos este lugar para una escapada romántica.

Para mí, nada 🙌.

Desayuné en el patio. Fue una estadía de 2 noches, todos allí eran excelentes, me sentí como en casa.

Hay un montón de opciones para el desayuno, incluyendo café, croissants, jamón, fruta y queso. El personal fue, como siempre, excelente, y el ambiente tranquilo. El hotel tenía una ubicación estupenda para un vuelo temprano. Además, estábamos a un minuto a pie del centro de Rivesaltes.

Sitio tranquilo en un agradable pueblo cerca de la playa y Perpinya. Anfitrión amable, desayuno en un bonito patio cubierto. Habitación original con bañera y ducha. Palacete privado con nevera, microondas y calentador.

Hemos disfrutado de una excelente relación calidad-precio en L'Orangerie. La habitación era acogedora, espaciosa y decorada con buen gusto. Además, el personal nos trató de manera amable y servicial. La ubicación del hotel era perfecta, cerca de hermosos lugares que complementaron nuestra experiencia.

La experiencia del desayuno podría haber sido mejor si hubiera habido más variedad de toallas disponibles. Sin embargo, estoy seguro de que si lo hubiéramos solicitado, el personal nos las habría proporcionado sin problemas.

tranquilo, anfitrión amable, fresco, desayuno en patio, habitación original con bañera.

Obtuve un gran valor por mi dinero durante mi estancia en un lugar super tranquilo en un pueblo cerca de la playa y con acceso fácil a ciudades como Perpinya. El anfitrión fue muy amable y la habitación era única y original, con una bañera y ducha muy chulas. Además, la privacidad y las equipaciones en la habitación, como la nevera y el microondas, fueron muy convenientes.

La experiencia del desayuno podría haber sido mejor si hubiera habido opciones más variadas.

Tranquilidad, ambiente relajado, anfitrión amable, desayuno abundante, habitación original y bien equipada, decoración única.

Na.

La limpieza del hotel era impecable y nos hizo sentir cómodos y seguros durante nuestra estadía. Las instalaciones del hotel eran increíbles, con una habitación espaciosa y bien equipada con una bañera y ducha únicas.- El desayuno servido en el patio era abundante y delicioso, y disfrutamos mucho de comer rodeados de plantas.- El personal del hotel fue extremadamente amable y servicial, brindándonos un excelente servicio sin ser intrusivos.

No pude encontrar ningún fallo.

Este hotel es una joya escondida en el corazón de un pueblo encantador. Las habitaciones son espaciosas, con una decoración preciosa y atención al detalle. Me encantó tener mi propia terraza para disfrutar de una copa de vino. Además, el desayuno es delicioso, con croissants recién hechos y mermeladas caseras.

Nada a mejorar, todo estuvo genial.

La cama es muy cómoda y la habitación es espaciosa y enorme, se duerme muy bien. El desayuno incluye fruta fresca, conservas caseras y deliciosos croissants. La ubicación es perfecta, justo al lado del centro de la ciudad, del río y de la playa. El personal es excelente, siempre atento a todo.

Desayunábamos café, croissants, jamón, fruta y queso por las mañanas. Nuestra habitación era súper espaciosa y tenía justo la cantidad de vino que necesitábamos. Además, estaba cerca de la estación de tren, a solo un paseíto. 🍷

Los mejores aspectos de nuestra estancia en este hotel fueron la limpieza impecable, las instalaciones del hotel que eran modernas y con estilo, el fácil acceso al parking, la conveniente ubicación en el centro de la ciudad y el amable personal. Además, disfrutamos de un delicioso desayuno que nos sirvieron en un encantador patio rodeado de plantas.

Todo estupendo.

L'Orangerie resultó ser el lugar perfecto para una escapada romántica. La habitación era acogedora, espaciosa y decorada con buen gusto. El anfitrión fue muy amable y el ambiente era super tranquilo. Estaba ubicado en un pueblo cerca de la playa y de ciudades como Perpinya, lo que complementaba perfectamente la experiencia. Además, el desayuno en el patio, incluso si llueve, era muy agradable. Nos impresionó mucho la originalidad de la habitación, que se encontraba dentro de un palacete con todas las comodidades necesarias, como nevera, microondas y calentador de agua.

Nada 👍🏼

Este hotel ofrece una escapada tranquila en un pueblo cercano a la playa y ciudades como Perpinya. Las habitaciones son espaciosas, silenciosas y decoradas con buen gusto. Algunas tienen bañera y ducha, y cuentan con equipamientos como nevera, microondas y calentador de agua. El desayuno ofrece pan recién hecho, croissants y mermeladas caseras, y se sirve en un hermoso patio lleno de plantas.

Algunos huéspedes mencionaron que resultó difícil encontrar lugares para cenar en el pueblo.